lunes, junio 30, 2008

El libro del verano

Bueno, bueno... veo que el tema del fútbol nos pone... pero nada, chavales, este es un blog de historia militar, así que cerramos el paréntesis impuesto por la hazaña de la selección y volvamos a lo nuestro.

Pues el pasado sábado fui al FNAC con mi mujer y mi hijo. Entramos para comprar una funda barata para la cámara de vídeo (la de JVC vale más de 30 euros) y sí, cogimos una de 14 €, pero acabamos gastándonos 80 euracos en libros. Hasta el nene se aferró a un cuento de Caillou y tuvimos que comprárselo.

Bien, pues cuando me di una vuelta por la sección de historia vi una novedad, un libro titulado HAZAÑAS Y CHAPUZAS BÉLICAS. En un primer momento me dije: "¡Oh, no! otro libro de anécdotas militares del tal Hernández ése". Vi que no, que era de un tal Gary Brecher, que no había oído en mi vida, así que lo miré por encima y lo dejé. Pero, después de un rato, cuando íbamos a pagar los que habíamos ido escogiendo, mi intuición -que no suele equivocarse- me dijo "¡píllalo!". Pues lo cogí sin ni siquiera abrirlo, como si fuera un melón.

Pues resulta que mi intuición no erró. En la contraportada habla del autor; dice que Gary Brecher (aunque se cree que es un pseudónimo) es "el más divertido, inteligente, salvaje y políticamente incorrecto experto militar de la historia". Yo pensé que se trataba del típico texto que confecciona la editorial para "vender la moto", pero resulta que... ES VERDAD.

Sí, chavales, no sólo el autor es así, sino que su libro es el más divertido, inteligente, salvaje y políticamente incorrecto que he leído en muchísimo tiempo. Lo estoy acabando (devorando, más bien), y me estoy desternillando con él, es buenísimo. El tío dice verdades como puños, incluso para referirse a España, que en un primer momento sientan como una patada ahí, pero que luego ves que no va muy desencaminado.

El libro no trata de anécdotas, sino que explica la verdad sobre las últimas guerras, pero de un modo muy peculiar. El título original es War Nerd, algo asi como el friki de las guerras, y lo ha escrito un pavo que escribe artículos en Internet, y que se ve que tienen mucho éxito entre los guerradictos, como él dice. Si domináis el inglés, podéis leer gratis la mayor parte del material del libro en esta web, pero os recomiendo que os lo compréis, es ideal para leérselo este verano, me costó 19,95 en el FNAC.

Bueno, no promociono más el libro porque tampoco me pagan por ello. De hecho, esa editorial -Los libros del lince- no la había oído hasta ahora.

Pero alguna vez una editorial se podría enrollar y mandarme algo por recomendar sus libros; no hace falta que sea un jamón, con un lote de ibéricos ya hago...

¿Hemos ganado?

¿Realmente hemos ganado? Yo todavía no me lo creo. Han sido taaaaantos años de decepciones que aún me parece que esto es un montaje, un falso documental de esos que están de moda.
Pero bueno, por si acaso es real, han habido varias imágenes impagables.

La primera; la de los alemanes derrotados ¡Increíble! ¡Insólito! La verdad es que los tíos no se han rendido en ningún momento, está claro que para ellos quedar segundos no era una opción, pero es que son unos tuercebotas al lado de los nuestros.

La segunda, el manteo de Luis, ¡qué imagen! No sé que decir. Pero... ¡marchando una estatua para hombre!

Y la tercera es la entrevista que han hecho a Iker Casillas -¡qué crack!- nada más acabar el partido; el tío dice "ahora hay mucho gracioso que se va tener que callar la boca", y además con su acento de Móstoles, ¡genial!
Pues bueno, me voy a la cama, espero no despertarme mañana y descubrir que todo esto ha sido un sueño, como la peli aquélla del Amenábar, y que en realidad caímos en cuartos contra Italia...

viernes, junio 27, 2008

Nuremberg (I)

Bien, mi mujer ya ha pasado las fotos al ordenador y os las puedo comenzar a mostrar. Esta primera entrada dedicada a Nuremberg será simplemente turística, para abrir boca.

Pues Nuremberg es una ciudad bonita en líneas generales. Quedó destruida durante la guerra por los bombardeos aliados en un noventa por cien; sus habitantes no sabían si planear una ciudad totalmente nueva o reconstruir la antigua, afortunadamente decidieron recrear la ciudad histórica. Esto hace que la ciudad parezca a veces un poco un parque temático, falta el sabor del paso de los siglos, pero el resultado es satisfactorio, como podéis ver. La foto de arriba es del Spitalgasse u Hospital del Espíritu Santo.

Esta es la Schöner Brunnen o Fuente Bella, en la Haupmarkt o plaza del Mercado. Mide 19 metros.
La Frauenkirche o Iglesia de las Mujeres, en la misma plaza del Mercado. Es del siglo XIV.

Esta figura no sé qué es, me imagino que es San Jorge, pero como adorno de la esquina tiene su gracia. Está cerca de la casa de Durero, que podéis ver abajo. No entré, pero hay un museo que debe estar bien.

Esto es sólo una pequeña muestra de lo que allí se puede ver. Visitar la ciudad es muy fácil, no hace falta metro o autobús, se hace todo a pie. Se encuentran un montón de sitios para comer muy baratos (abundan los kebabs), hay una parte moderna con tiendas de todo tipo, hay librerías muy completas, etc. Si sois chocolateros, no entréis en un super, hay de muchos tipos y muy bien de precio; yo no pude resistirme y ahora tengo en casa una reserva estratégica para un año por lo menos.
La ciudad da para un par de días, así que es ideal para una escapada de fin de semana o puente. Eso sí, tened en cuenta que no hay vuelos de bajo coste a Nuremberg, así que lo que más subirá será el billete de avión. Desde el aeropuerto se llega fácilmente a la ciudad en metro. Los hoteles tienen precios bastante moderados y están casi todos junto a las murallas de la ciudad antigua. Yo estuve en el Motel One, lo recomiendo.
Pues hasta aquí la guía turística. En la próxima entrega ya vamos fuerte; veremos la sala en donde se celebró el Proceso de Nuremberg.

martes, junio 24, 2008

Ya estoy aquí...

Bueno, ya estoy por aquí de nuevo. Como suponía, me acabo de encontrar con mogollón de trabajo atrasado, así que a ver cuándo puedo atacar el tema del viaje.
Dejando de lado el tema de la SGM, allí en Alemania la Eurocopa se vive a todas horas y en todo momento. Las tiendas y los restaurantes están adornados con bufandas y banderas, hay pantallas gigantes instaladas en las calles y plazas. Incluso los coches llevan banderitas que se compran por un un euro en los todo a cien y que se colocan con la base cogida en la ventanilla; hay de Alemania, claro, pero un montón de Turquía, Italia... sólo vi a dos que llevaban la de España.

Pues el tema de la Eurocopa no me fue muy bien para poder descansar; la primera noche ganó Rusia a Grecia y por debajo de la ventana de la habitación de mi hotel no pararon de pasar coches haciendo sonar la bocina; nunca pensé que hubiera tantos rusos en Nuremberg... Pero la segunda noche ganó Turquía a la República Checa; ni os cuento la cantidad de turcos que hay allí y lo escandalosos que pueden llegar a ser.
La tercera noche le tocó el turno a los alemanes, que estuvieron un poco más comedidos al celebrar su triunfo contra Austria y la cuarta a los italianos, ya os podéis imaginar cómo celebraron su triunfo sobre los gabachos.
Pero lo importante, en este caso y sin que sirva de precedente, no era el fútbol, sino descubrir la huella de la SGM que permanece aún hoy en Nuremberg, y eso es algo en lo que esta ciudad no decepciona, siempre y cuando estemos atentos a los detalles que a los demás les pueden pasar desapercibidos. Ya lo iremos viendo.
Y por último, pues qué deciros del partido de España-Italia. Simplemente, uno de los días más felices de mi vida, futbolísticamente hablando.
Al llegar a los penaltis visualicé claramente el tema; estaba seguro de que fallaría Cazorla, el novatillo, y que así completaría la tríada con Eloy (México 86) y Joaquín (Corea 2002). Pero cuando el chaval metió su penalti comencé a dar botes porque estaba convencido de que justo en ese momento habíamos cambiado la historia que teníamos fatalmente asignada.
Y cuando Cesc metió el gol del triunfo hice unos cuantos cortes de mangas; a los italianos, a los que se alegran cuando pierde España, a todos esos años de frustraciones del "jugamos como nunca y perdimos como siempre", hala, a todo junto. No sé si llegaremos a la final y si la ganaremos, pero al menos me di el gustazo y que me quiten lo bailao.
Pues bueno, en cuanto despeje un poco la cola de asuntos pendientes me pongo a contar lo que he visto por allí.

martes, junio 10, 2008

¡Me voy a Nuremberg!

Bueno, bueno, este sábado me voy a Nuremberg. Sí, a la ciudad en donde los nazis celebraban sus multitudinarios fiestorros y donde luego los juzgaron por sus fechorías. Iba a explayarme un poco explicando lo que se puede ver allí, pero estoy superliado. Tengo que acabar para el viernes todos los encargos que tengo y voy a tope.
Eso sí, ya lo tengo programado para poder visitar la histórica sala del juicio, que sólo la abren unas horas el domingo en visitas guiadas.
Aunque me he documentado ya sobre lo que hay allí, si alguno ha estado por allá y me quiere dar alguna pista interesante se lo agradeceré.
Así que estaré allí unos días, recabando material para un proyecto que tengo para el 2009, y luego me iré con la familia a pasar unos días fuera, estaré de vuelta el 25 de junio.
De mientras, os dejo rápidamente alguna recomendación. Ha salido un libro que a priori parece interesantísimo. Es UN MUNDO EN GUERRA: HISTORIA ORAL DE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL de Richard Holmes y editado por Crítica.
Ahí se recogen las entrevistas que hicieron a protagonistas de la SGM y que una parte de ellas fueron utilizadas para la famosa serie de TV del mismo título, que los veteranos como yo recordaréis y que últimamente hasta la vendían en la teletienda. El libro que vi en la librería estaba con el plástico y me dio corte romperlo, pero sin llegar a abrirlo ya lo recomiendo. Son casi 30 euracos, pero creo que es una buena inversión.

Han sacado también dos libros más sobre el atentado contra Hitler del 20 de julio de 1944. Uno es MATAR A HITLER, de Roger Moorhouse y publicado por Debate. El otro es ALIANZA CONTRA HITLER, de Agostino von Hassell y publicado por Ariel. La verdad es que estuve poco rato hojeándolos y no puedo emitir una opinión muy fundada, pero la primera impresión no fue muy positiva. Más que por el interés que puedan tener (aunque igual me equivoco), parecen más bien libros sacados por las editoriales para sacar tajada comercial de la próxima peli de Tom Cruise, Valkiria, basada en el atentado contra Hitler. Seguro que algún autor español aprovecha también lo de la peli para sacar un libro...

Y nada más, a ver si puedo enviaros un saludo desde algún cibercafé de Nuremberg y ya os contaré a la vuelta. Y a ver si el 26 de junio España juega esa semifinal en Viena; por lo pronto ya hemos ganado a los rusos...

jueves, junio 05, 2008

Jarras, libros y fútbol

Bueno, pues ya tengo mi jarra de Indiana Jones, después de pagar este mediodía 1 euro extra con el menú del Burger King. Esta noche no he cenado, pues todavía estoy padeciendo las secuelas del burger doble con queso y bacon que me zampé; supongo que las boas que se tragan un armadillo deben tener digestiones similares. Pero el sacrificio de mi valiente estómago ha tenido su premio y la jarra de Indy ya adorna mi cocina.

Me iba a hacer la colección de las cuatro (una por cada peli), pero sólo de pensar en los otros tres menús que debería engullir ya se me van las ganas; creo que con la que tengo, la de la Ultima Cruzada (la de la foto), ya tengo bastante.

Y sí, yo, que soy tan listo que las campañas de marketing no tienen nada que hacer conmigo, esta vez he picado. Por cierto, aún me estoy riendo del programa de ayer de Muchachada Nui. Genial la parodia de Fernando Sánchez Dragó. Eso sí que es humor y no lo que vi luego, un trozo del Caiga quien Caiga en la Sexta: ¡qué patético! No se han enterado de que la fórmula del reporterillo graciosillo ya no hace gracia ni al que la inventó.

Bueno, retomo; pues hoy, antes de pasarme por el Burger King aquí-tú-eres-el-king he ido a un sitio en donde he tenido acceso a una información confidencial. Ni más ni menos que las cifras de ventas de libros casi en tiempo real, en las principales librerías de España. Pues sí, ha sido curioso de ver.

Lo primero que me ha sorprendido -estoy hablando del género de no ficción- es que hay algún historiador de gran prestigio y en una editorial grande que está vendiendo poco más que mi Norte contra Sur, que por cierto está funcionando como un cohete, y eso que salió en febrero. También me ha sorprendido -y mucho- que hay un libro sobre un episodio concreto de la II Guerra Mundial que ha sido lanzado por una gran editorial con una potente preparación artillera pero que, inexplicablemente, se ha pegado un talegazo de campeonato.

Con esto quiero decir que prever el éxito o el fracaso de un libro es imposible, no se sabe cómo puede responder el público. Por ejemplo, y perdón por el autobombo, me ha alegrado ver mi 100 mejores anécdotas de la Segunda Guerra Mundial (2004) todavía por la parte media de la tabla.

Por lo que hace referencia a Tempus, la editorial con la que colaboro, he comprobado que las cifras de ventas de los títulos que se han sacado hasta la fecha son muy positivas. Estoy contento porque parece que se ha acertado con el gusto de la gente. Ahora acaba de salir en Tempus el libro LA GUERRA SECRETA DE HIMMLER, una obra que está envuelta en la más ácida polémica desde que salió en Gran Bretaña en 2005.

En vez de relatar todo el asunto que originó la controversia, que es tan turbio como inquietante, os recomiendo que si véis el libro en una librería os leáis el Apéndice escrito por el autor después del follón que se armó tras su publicación; son siete páginas que no tienen desperdicio.

Tengo también el siguiente libro de Tempus pero, como todavía no ha sido distribuido a las librerías porque acaba de salir de la imprenta, lo comentaré otro día. Y nada, a disfrutar de la Eurocopa que comienza este sábado con un interesantísimo Suiza-República Checa, así para nosotros comenzará el martes, con el debut de España, ay ay, ay...

lunes, junio 02, 2008

Argentina´78

Bueno, hoy iba a hablaros de la figura de cera de Hitler que van a poner en el museo de Madame Tussaud en Berlín, pero he cambiado de opinión.

Resulta que esta noche pasada he tenido una pesadilla. Estaba en una reunión y me avisaban de que habían unos señores en la puerta que preguntaban por mí. Me asomaba por la ventana y... ¡era la Gestapo! Al final conseguía escapar de los nazis corriendo por la calle mientras me disparaban, pero me parece que tengo que descansar un poco de la Segunda Guerra Mundial, que luego esto es lo que pasa.

Pues esta noche, hojeando El País mientras cenaba, he visto un interesante artículo sobre el Mundial de Argentina 78, del que se cumplen ahora 30 años. Aquí lo podéis leer en su versión digital.
Esto me ha hecho recordar ese Mundial. Entonces yo tenía once años y me acuerdo perfectamente. Recuerdo cuando España la cagó contra Austria en el primer partido, a primera hora de la tarde, en el que perdimos 2-1. Y luego vendría una de las mayores tragedias de la historia del fútbol español... el fallo de Cardeñosa. Fue increíble, el hombre solo ante la puerta vacía de Brasil, y al controlar el balón dio tiempo para que un defensa, Amaral, se colocase debajo de los palos y salvase el gol.
Los más jóvenes no os acordaréis de esto, pero el fallo de Cardeñosa fue un drama nacional. Aquí lo podéis ver, sacado de un reportaje de la Cuatro, pero no sé por qué pusieron de fondo una canción ridícula, la de Benny Hill, cuando hubiera sido más adecuado el Réquiem de Mozart.
Desde entonces, el pobre Cardeñosa ha tenido que cargar con esa cruz; siempre le preguntan lo mismo, cómo pudo fallar aquéllo, aunque hayan pasado treinta años. Cuando se muera -espero que dentro de mucho tiempo-, en su obituario figurará con letras grandes lo del celebérrimo fallo.

Del Mundial 78 guardo como recuerdo una bolsa vacía de ganchitos con el dibujo de la mascota, Gauchito, la tengo por casa de mis padres.
Y recuerdo también que no vi la primera parte de la final porque tuve que ir a misa; pero se ve que el cura era también futbolero, porque aligeró el sermón y acabó antes de tiempo.
A mí me caía bien Holanda, quería que ganase después de haber perdido la final de Alemania´74, pero Argentina también me gustaba. Sobre Kempes, el héroe de la final, me acuerdo de la frase "No diga gol, diga Kempes".

Y, ya que estamos, del Mundial de Alemania´74 me acuerdo que fue la primera vez que vi una tele en color. En el escaparate de una tienda de electrodomésticos tenían una tele en la que daban el Alemania Federal-Alemania Oriental. Me quedé flipado viendo los colores. Luego tardó unos años en implantarse la TV en color en España, por lo que esa transmisión debía ser experimental.
¡Ah! Y también me acuerdo de que en la Coca-Cola venía una colección de cromos del Mundial, en la que me sorprendía la presencia de los jugadores de Haití y Zaire (me acuerdo también de que en un capítulo de Los Roper la Mildred recriminaba a su marido que hubiera apostado a que Zaire ganaba el Mundial).

Pues paro aquí de contar batallitas, que parezco un abuelete. Eso sí, a ver si España se saca de encima el síndrome Cardeñosa y hacemos algo en esta Eurocopa, aunque sea llegar a semifinales, pero caer en cuartos otra vez no, por favor. Tal como dice este emocionante vídeo, "es hora de cambiar nuestro destino" y ganar algo, aunque sea comprando a los rivales, tal como hizo Argentina con Perú en 1978...